lunes, 3 de diciembre de 2012
Querido diciembre
Diciembre es el mes mas melancólico, recuerdas los otros 11 meses llenos de historias anécdotas y demás.
El fin de un año y el comienzo de otro.
Te quiero.
Las cosas no eran fáciles para ellos, estaban bien, eran felices a su manera. Se querían era lo que importaba, a cada mes mas complicaciones pero eso lo contare mas tarde. Todo eran esperanzas e ilusiones por parte de ambos, él se esforzó excesivamente llegando ha cometer ciertas locuras, locuras que hace tan solo un enamorado. Ella mientas tanto sintiéndose impotente, contemplaba con asombro y temor cada acción del joven, lo quería con locura sin lugar a duda. Sobrellevaba el otro lado, comentarios, acciones, palabrerías innecesarias, que herían.
Recordaban siempre que lo necesitaban cada palabra bonita, cada caricia, cada abrazo o cada beso, en las noches turbias, llenas de dudas y complicaciones. Se animaban mutuamente, tal vez uno mas que otro. Siempre hay alguien mas fuerte que otro.
Como se dice, después de la tormenta viene la calma, y así mismo fue.
Un tiempo tranquilo sin muchos obstáculos ellos recuerdan por separado, una noche, la fiesta de un pueblo pequeño, sentados hablando, se sentían a gusto, con una copa en la mano, la música sonaba, aunque solo se centraban en ellos mismos, miradas y caricias. Algún beso.
Poco duro todo eso, luego llego el tormento. Vuelta ha empezar con todo aquello. Mentiras, engaños, desconfianza, nada era como se creían Ambos cometieron errores, que se echaban en cara, cada discusión Mas mierda en cada pelea. Todo había decaído, desde recordar los buenos momentos hasta el amor que sentían Nada era igual y no iba a cambiar lo sabían, pero eran tozudos, insistían pero no resultó.
Me gustaría detallar cada pagina del libro, de esa bella historia que podía llegar a tener un final precioso. Pero es tan solo un resumen de esa historia.
Terminas el libro, y sinceramente no quieres volver a leer ni tan siquiera una linea. No quieres recordar el final, sabes que no te gusta pero lo dejas en la estantería. Para no olvidar, al menos los buenos momentos leídos la ilusión de esas bonitas frases.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario